A los 95 años de edad, Joe Gaxiola contaba con la energía y la alegría de vivir, que solamente se encuentra en un hombre que tenga la mitad de su edad. Su madre murió al nacer Joe y su padre cuando había cumplido los 119 años. Joe comentaba sobre su trabajo: “Jesús, tu pusiste este trabajo en mis manos, ayúdame a hacerlo bien”.
Él servía en inglés y español como consejero de los beneficios del Seguro Social en el programa Alcance para las personas mayores de San José, ayudando a sus clientes a conocer sobre sus derechos de jubilación, sindicatos o beneficios de retiro del ejército, al igual que de incapacidad física. A menudo los representaba hablando por ellos.
Joe nació en Alamor, Sonora, México. Era parte descendiente yaqui y en su juventud participó en la Revolución Mexicana. Al desilusionarse, junto con algunos líderes se retiró, a pesar de que su primo Francisco Madero fue Presidente de México, durante la Revolución de 1910.
Cuando Joe vivía en el este de Los Ángeles, se envolvió con la comunidad y fue uno de los miembros fundadores, en 1947, de la Organización de Servicio en la Comunidad (CSO), organizando luego a la gente para que votaran, para así de esa forma conseguir la reparación de calles, alumbrado eléctrico y otras clases de mejorías en el vecindario. Después vivió con su esposa, Francisca, en Hollister, en San Juan Bautista y en Watsonville, trabajando con su familia en las cosechas. En Watsonville, Joe iba a los ranchos a visitar a las personas mayores ofreciendo sus servicios para ayudarlos a obtener su penbsión del Seguro Social.
En San José, Joe fue Presidente del Capítulo CSO, manteniendo vigente su ayuda a los hispanos. Sobre su avanzada edad, Joe comentaba: “Mi consejo es que todos deberían participar en diferente tipo de actividades. Por un lado significa mucha diversión, a la vez que abre insospechados horizontes de placer, satisfacción y recompensas. Por lo menos esa ha sido mi experiencia durante muchos años de mi vida. No hay que sentir temor de envejecer. Lo único que ocurre es que la cara se llena de arrugas, pero el corazón sigue igual de joven”.
En 1968, Joe fue incluído en los Récords del Congreso de los Estados Unidos por su extraordinario servicio a la comunidad, a la vez que fue nombrado para el Concilio de Ancianidad. En 1987, Joe celebró su 59 avo. aniversario de matrimonio con su esposa. Tuvo 9 hijos.
Cuando le preguntamos cuando se retiraría, Joe contestó: “La gente me da vida y me retiraré cuando ya no hayan más ciudadanos mayores”. © La Oferta Newspaper.
<English version>
Joe Gaxiola at 95 had the energy and joy of living, one would find in a man half his age. His mother died when he was born, and his father when he was 119. Joe used to say of his work “Jesus, you gave me this job in my hands so help me to do it well.”
Joe served people as Spanish-English speaking Social Security benefits counsel in the San Jose Senior Outreach Program helping his clients to learn of their entitlement to retirement, union or veteran benefits and disability, and often speaking on their behalf.
Joe was born in Alamor, Sonora, Mexico. He was part Mayan Indian, and as a young man was part of the Mexican Revolution. As he became disillusioned with some of the leaders he quit, even though his cousin Francisco Madero was President of Mexico during the 1910 Revolution.
When Joe lived in east Los Angeles, he became one of the founding members of the Community Service Organization in 1947 which then organized people in the communities to vote so that they could get badly needed street repairs and other neighborhood improvements. With his wife, Francisca, they lived in Hollister, San Juan Bautista and Watsonville. In Watsonville, Joe visited older people on the farms asking them if they needed his service helping them to get their Social Security pension.
Joe was President of the San Jose C.S.O. chapter, where he also helped Hispanics. Of age, Joe said, “My advice to all would be to become involved and stay involved. It is a lot of fun for one thing. It opens up unsuspected horizons of pleasure satisfaction and rewards. At least, that has been my experience in many years of life. Don’t be afraid to get old. The only thing that happens is your face wrinkles but not your heart.”
In 1968, Joe was listed in the U.S. Congressional Records for outstanding community service, and nominated to the Council of Aging. In 1987, Joe celebrated his 59th anniversary with his wife. He had 9 children and many grandchildren. Joe use to comment, “People gives me life.” When asked when he will retire he said “When I run out of seniors.” © La Oferta Newspaper.