Entrevista por Guadalupe Bellavance
Aunque nació en San Diego, California, Moreno ha vivido casi toda su vida en San José. La vida artística de Rick, se inició siendo muy joven, en Gavillan College. Bailó danza folklórica de México por 25 años, de los cuales, los primeros 15 fueron dedicados a intensas presentaciones con los ballets Los Lupeños de San José y la desaparecida Xochipilli.
Actualmente, ya no pertenece a ninguna compañía artística ya que desde sus días de baile, nació otra gran pasión: la música. Rick toca la jarana jarocha y el violín.
“El estilo de música que toco es la huasteca y jarocha, es ligera e intrínseca, una de las más difíciles de interpreter por la rapidez y el ritmo que tiene”, explicó Moreno quien tenía 14 años de edad, cuando se sintió atraído por las melodías mexicanas. Sin embargo, tiene otro talento más y es la pintura.
“He pintado toda mi vida, desde que era un niño”, dijo Rick, aduciendo que sus dibujos lo llevaron durante sus años de bachiller y colegio a estudiar arte y experimentar en óleo, acuarela, tempera y acrílico, usando más las últimas tres técnicas. Moreno enfatizó que prefiere “la acuarela, porque es la pintura de la luz rara y nítida cuando la usas, es transparente”.
Define su estilo como realista y surrealista al mismo tiempo, ya que como él mismo señaló, “una pintura luce real, el búfalo por ejemplo, es real, pero todo lo que le rodea, es creado por mí y es surrealismo”.
Rick Moreno no ha podido llevar su obra a grandes exhibiciones, sin embargo, gran parte de su talento se ha podido apreciar en las escenografías que diseñó y elaboró por años, para las presentaciones de Xochipilli y Los Lupeños de San José. Además, ha expuesto en eventos comunitarios como el Cinco de Mayo y desde 1997, viene colaborando con Hispanic Charity Ball.
El Arte de enmarcar
“Cuando salí del colegio, dos o tres años después, estaba buscando trabajo y encontré uno haciendo enmarcaciones. Y enmarcar eso fue lo que me llevó a este campo. Tomé el trabajo y laboré para otra persona, quien era un artista también”, explicó Moreno.
Sin embargo, Rick describe su actividad de enmarcar como “una extensión del arte, cuando uno enmarca una pintura y es embellecer más el cuadro, hacerlo más atractivo”.
En reconocimiento a su pasión, dedicación y conocimiento de su trabajo, el 9 de octubre de 1988, Rick Moreno Jr. recibió un certificado de enmarcar (Certified Pictures Framer, CPF) por The Professional Picture Framers Association. Esto alentó a Moreno, quien realmente conoce su labor y la realiza de forma excelente.
Después de trabajar 15 años para otro, Moreno, decidió abrir las puertas de su propio negocio en 1997, Mexica Art And Framing. A esta Aventura invitó a su madre, la señora Ann, como socia.
Otro factor que lo hizo abrazar con fuerza la labor de enmarcar fue que desde el colegio realizaba trabajos en madera. Hoy en día, cuando su tiempo se lo permite, realiza piezas únicas que son consideradas obras de arte por no existir reproducciones una igual a la otra y ser diseños originales. Ha elaborado algunos muebles, mesas y piezas para la casa. Aunque le gustaría hacer más muebles, confesó que ahora no es el momento ni tiene tiempo con sus otras actividades.
Planes
Muchas son las anécdotas que Rick Moreno ha compartido con su madre. Los difíciles inicios, las veces que pensaron se iban a poder pagar la renta o no, hasta la reubicación de Mexica Art And Framing en el año 2000.
Después de la tormenta viene la calma y con ello nuevos horizontes. Los planes de Rick son seguir con el negocio y desarrollar más, el cual además de enmarcar todo tipo de pinturas, fotos y cuadros, el espacio es utilizado como una galería para artistas locales. Por tal motivo, el 27 de mayo de 2001, el público en general disfrutó de la primera exhibición de pinturas, fotografías y esculturas de varios artistas locales, entre las que se encontraban las obras de Rick Moreno, además de la lectura de poesías del autor Mario Virgen y música mexicana.
