Los Ángeles, 31 ago (EFE).- La Unión de Campesinos (UFW) planteó este lunes la posibilidad de realizar un boicot en contra de la procesadora de pollo Foster Farms ubicada en Livingston, California, después de que, según el sindicato, la compañía no cumpliera con los protocolos de seguridad ante un brote mortal de COVID-19.
Al menos 392 empleados han dado positivo por COVID-19 desde abril y al menos ocho trabajadores contagiados han muerto.
El sindicato dijo en un comunicado que se compromete a boicotear los productos de Foster Farms si la planta de procesamiento de aves de corral en Livingston continúa sin proporcionar un lugar de trabajo seguro.
A las voces de protesta se unió la organización Jakara Movement Punjabi Sikh, el Grupo de Fe del Valle, y familiares de las víctimas.
Los representantes de UFW aseguran que Foster Farms ha fallado repetidamente en su responsabilidad de proteger adecuadamente a sus empleados, citando, en parte, una orden detallada de los funcionarios de salud del condado de Merced, donde está ubicada la planta.
“UFW nota que Foster Farms no ha cumplido con las solicitudes continuas de pasos transparentes para garantizar la seguridad de los trabajadores”, subraya comunicado.
Inicialmente, el Departamento de Salud del Condado de Merced ordenó que la planta de procesamiento de pollos cerrara el 27 de agosto luego de múltiples brotes de COVID-19 y violaciones de las órdenes de la dependencia. Luego retrasaron el pedido dos veces. El sábado, el Departamento de Salud determinó que la planta podría operar hasta el martes por la noche, cuando está programada para un cierre de al menos una semana.
Foster Farms confirmó en un comunicado difundido por medios locales el sábado pasado que la planta principal, donde trabajan unos 1.400 empleados, cerraría para permitir una limpieza profunda y pruebas de los empleados.
Según el periódico Sacramento Bee, la compañía pagará a los trabajadores que se sometan a pruebas dos veces esta semana por cada día que la instalación esté cerrada.
También se completarían dos rondas de pruebas de coronavirus para los empleados en las otras instalaciones de procesamiento que no sufrieron brotes, y que permanecerán abiertas según la orden del condado, anotó el rotativo.
El sindicato de trabajadores agrícolas representa aproximadamente a 2.000 de los más de 3.000 empleados en la compañía Foster Farms en Livingston.
La Unión no fijó una fecha límite para iniciar el boicot.
Este lunes California llegó a 704.085 casos positivos de COVID-19, y las muertes relacionadas con el virus llegaron a 12.933.
