Miami, 2 sep (EFE).- La Adictiva, una de las bandas más antiguas de música regional mexicana, celebra sus 30 años con su primer disco en casi cinco años, nuevo cantante y una estrategia para imponerse entre las nuevas generaciones, que según dijeron sus integrantes a Efe, ya ha comenzado a dar frutos.
Para sus dos vocalistas principales Guillermo “Memo” Garza e Isaac Salas, la banda de San José de Mesillas, en el estado mexicano de Sinaloa, La Adictiva está en una “gran etapa”, en la que no hay límites creativos y en la que impera el deseo de hacer cosas que los conecten con “lo que quieren las nuevas generaciones”.
“Esa es la prioridad para los próximos 30 años, seguir siendo vigentes y llevar el regional mexicano tan lejos como se pueda”, indicó Garza durante una videollamada en la que también estuvo presente Salas.
Con esto en mente, los artistas le están dando los toques finales al nuevo disco de la agrupación que saldrá este octubre; el primero desde “Durmiendo en el lugar equivocado”, el álbum que sacaron en 2016.
“Estoy muy feliz con lo que está quedando. Solo nos falta grabar la última canción y luego concluir el proceso de masterización y lo demás”, agregó Salas.
“Esperamos que el público quede satisfecho porque le hemos puesto muchísimo cariño”, manifestó Garza.
La producción, para la cual todavía no se ha escogido nombre, incluirá algunos de los temas que los han colocado entre una de las bandas más internacionales dentro de su género.
Entre ellos está su más reciente sencillo “Lo que nunca será”, además de “Escondidos” que tiene más de 82 millones de visualizaciones en YouTube, y “En peligro de extinción”, su video más visto hasta la fecha en esa plataforma, con más de 550 millones de visualizaciones.
“Pero también vamos a tener temas inéditos y creo que se van a sorprender de una forma muy positiva”, agregó Garza.
UNA BANDA MILLENNIAL
Los artistas se ríen cuando piensan que La Adictiva nació casi en el mismo año que ellos.
“Es un privilegio ser la cara de una agrupación que tiene tanta edad como nosotros y que sigue innovando con buenos resultados”, indicó Salas, quien cumplió 32 años en marzo.
La banda fue formada en marzo de 1990 y su primer disco salió en 1996, con un enfoque en la música norteña romántica. A principios de este siglo, La Adictiva se sumó a la ola de los narcocorridos, con canciones dedicadas a Joaquín “El Chapo” Guzmán y Rafael Cano.
Sin embargo, sus mayores éxitos siguieron siendo las historias de amor y desamor. Tanto, que en 2012 y 2013, la agrupación fue nominada a los Latin Grammy por sus discos “Nada iguales” y “Muchas gracias”, que tenían en su mayoría temas románticos.
“La banda es millennial como nosotros”, dijeron los cantantes entre risas, mientras explicaron que la estrategia de sacar una seguidilla de sencillos y hacer esperar a los fans por un nuevo álbum les ha beneficiado.
“Pero la verdad es que ya es hora. Tanto ellos como nosotros estamos ansiosos”, reconoció Garza.
MALA SUERTE
En febrero de este año, La Adictiva anunció que Jerry Corrales, quien acababa de dejar la banda La Ejecutiva, se sumaría al equipo como el tercer cantante. La idea era tener más flexibilidad sobre el escenario durante el “Tour 30 aniversario”, que habían planificado para todo 2020.
La pandemia puso un alto y tanto Salas como Garza lo lamentan, no solo por ellos, sino por Corrales.
“No hemos podido compartir mucho con él, porque se acababa de sumar cuando pasó todo esto”, reconoció Garza.
Sin embargo, ambos artistas confían en que de una u otra forma se retomará la parte escénica de sus actividades, dejado de estar en contacto para terminar el disco.