Ginebra, 28 dic (EFE).- La aparición de dos nuevas variantes del coronavirus, un hecho natural y normal cuando un virus se reproduce de forma intensa, no significa que haya que reconsiderar la eficacia de las vacunas que se han desarrollado, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las mutaciones “no significan automáticamente que tengamos que reconsiderar los efectos de las vacunas”, aseguró en una rueda de prensa la especialista en vacunas de la OMS, Ana María Henao-Restrepo.
Dos variantes distintas del coronavirus descubiertas de forma casi simultánea en el Reino Unido y en Sudáfrica han causado preocupación mundial por lo que podrían significar en los esfuerzos para poner bajo control la pandemia con un grupo de vacunas que han sido desarrolladas.
El temor ha sido tal que numerosos países han interrumpido los enlaces aéreos con ambos países.
La OMS ha explicado que los virus son naturalmente susceptibles a mutar, pero que los cambios que experimentan no necesariamente cambian algo esencial en ellos.
En estos casos concretos los estudios iniciales no han encontrado evidencia de que algo haya cambiando en cuanto a la severidad de la infección.
Las primeras evaluaciones realizadas en el Reino Unido indicaban que la variante identificada en este territorio sería más contagiosa, pero esto se está analizando ahora en una red internacional de laboratorios, declaró la jefa de la célula anticovid en la OMS, María Von Kerkhove.
“Trabajamos con científicos de todo el mundo que vigilan los cambios y las mutaciones del virus. Los cambios son normales y los que se han detectado tienen escaso impacto en el comportamiento del virus”, indicó a la prensa.
La OMS tiene un grupo de trabajo dedicado a seguir la evolución del coronavirus y se espera que los estudios más profundos que se están haciendo de las dos variantes se conozcan en las próximas semanas.
El director de Emergencias Sanitarias en la OMS, Mike Ryan, lamentó que muchos países hayan reaccionado aislando al Reino Unido y Sudáfrica, y explicó que si estos países han sido capaces de detectar las nuevas variantes es porque hacen las secuencias genéticas del virus y comparten esta información con el resto del mundo.
“Los países no deben ser castigadas por ser transparentes, por colaborar y guiarse por la ciencia”, comentó Ryan.
“Cerrar un país completamente no es ni posible en el mundo actual ni es la acción de salud pública más efectiva”, agregó.