Washington, 29 dic (EFE).- El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, arremetió este martes contra el liderazgo republicano del Congreso, al que tildó de “débil” y “cansado”, en alusión al jefe de la mayoría conservadora en el Senado, Mitch McConnell, por no apoyarle en las medidas que lleva abanderando en los últimos días.
Bajo esta pugna subyace una lucha por mostrar su influencia en el partido, con la salida de Trump de la Casa Blanca a la vista el próximo 20 de enero.
En varios tuits, el mandatario saliente reprochó este martes sin citar a McConnell que no le haya respaldado en el aumento de los cheques de estímulo y su veto a la ley con el presupuesto anual de defensa.
“NECESITAMOS UN LIDERAZGO REPUBLICANO NUEVO Y ENÉRGICO. Esto no puede aguantar”, escribió Trump en Twitter desde su club de golf en Mar-a-Lago, en Florida, donde pasa las festividades navideñas.
UNA RUPTURA QUE EMPEZÓ CON EL RECONOCIMIENTO A BIDEN
La ruptura de Trump con los responsables republicanos en el Congreso comenzó hace dos semanas cuando McConnell admitió la victoria del demócrata Joe Biden en los comicios presidenciales del pasado 3 de noviembre, lo que el presidente saliente aún no ha hecho.
En uno de sus tuits, Trump se quejó de que “el liderazgo republicano débil y cansado permitirá que una mala Ley de Defensa sea aprobada. Digan adiós a la terminación crucial de la Sección 230, sus Monumentos Nacionales, Fuertes (¡nombres!) y Tesoros (presentada por Elizabeth ‘Pocahontas’ Warren), 5G, y a que nuestros grandes soldados sean replegados y traídos a casa desde tierras extranjeras que no hace NADA por nosotros”.
“Un acto desafortunado de cobardía y de sumisión total de la gente débil a las Grandes Tecnológicas -siguió- ¡Negocien una Ley mejor, o consigan mejores líderes, AHORA! ¡¡¡El Senado no debería aprobar la NDAA (la Ley de Defensa) hasta que sea arreglada!!!”.
La semana pasada el mandatario vetó el proyecto de ley con el presupuesto anual de defensa, de unos 741.000 millones de dólares, aunque el lunes la Cámara de Representantes dio un primer paso para anular dicho veto y el Senado votará mañana sobre este asunto.
“Hoy el Senado fijará un voto final para mañana, miércoles, para que esta cámara siga el asunto. Pronto esta importante legislación será aprobada como ley”, indicó McConnell, quien instó a sus colegas de bancada a refrendar la legislación de defensa, lo que de producirse sería la primera vez que el Congreso anula un veto presidencial durante el mandato de Trump.
Entre otros puntos el presidente critica que el proyecto restrinja su capacidad para retirar a tropas estadounidenses de Alemania, Corea del Sur y Afganistán, como él había prometido, además de una disposición para cambiar el nombre de una decena de bases militares bautizadas en honor a los líderes de la Confederación sureña en la Guerra Civil (1861-1865), que se consideran símbolos racistas del legado de esclavitud.
El mandatario tampoco ve con buenos ojos que la legislación incluya una cláusula para acabar con la llamada “Sección 230”, que protege a los gigantes de internet como Twitter y Facebook de cualquier consecuencia legal por lo que terceras partes publican en sus sitios web.
BlOQUEO AL AUMENTO DE LOS CHEQUES DIRECTOS
Durante la sesión en el Senado, McConnell hizo este martes otro desaire a Trump al bloquear la consideración de una propuesta para aumentar de 600 a 2.000 dólares los depósitos directos a ciudadanos contemplados en el paquete de estímulo económico de 900.000 millones de dólares, contradiciendo así al mandatario.
En su discurso, McConnell recordó que presidente saliente firmó el domingo el rescate, aprobado la semana pasada por las dos cámaras del Congreso, que incluía transferencias directas de 600 dólares a los contribuyentes en una situación más vulnerable.
Durante cinco días, Trump bloqueó la firma de la medida al opinar que la cantidad de 600 dólares no era suficiente, aunque finalmente estampó su rúbrica el domingo no sin antes solicitar que se incrementara el importe de los cheques.
Durante las negociaciones del rescate, los republicanos habían rechazado un monto superior al creer que se dispararía el déficit presupuestario. El lunes, la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, dio su visto bueno a esa subida con el respaldo de legisladores de ambos partidos.
Hoy McConnell no aclaró qué pasará con esa propuesta; tan solo se limitó a señalar que esta semana el Senado “comenzará el proceso para poner el foco” en tres prioridades del presidente: los cheques de estímulo, la revaluación de las protecciones legales especiales a las tecnológicas y las investigaciones sobre un supuesto fraude electoral, alegado por Trump sin ofrecer pruebas.
Después de que McConnell finalizara, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, solicitó en la sesión que se estudiara aumentar el monto de los cheques de estímulo y que se votara, a lo que objetó el republicano sin hacer comentarios.
Cada vez más conservadores se han unido a los llamamientos para que se apruebe un incremento del importe de los depósitos directos, entre los que figuran los senadores por Georgia, David Perdue y Kelly Loeffler, que se juegan su reelección el próximo 5 de enero en una votación especial en este estado, en la que se decidirá la mayoría que gobernará el Senado nacional.