La Oferta

April 25, 2024

Las autoridades comienzan a arrestar en EE.UU. a los asaltantes del Capitolio

Un seguidor de Donald Trump, identificado como Richard Barnett, se sienta en el escritorio de la presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, luego de irrumpir en el Capitolio estadounidense durante protestas el 6 de enero, en Washington (Estados Unidos). EFE/ JIM LO SCALZO

Washington, 9 ene (EFE).- Las autoridades de EE.UU. comenzaron este fin de semana las detenciones de participantes en el asalto al Capitolio mientras los demócratas del Congreso detallan sus planes para iniciar el lunes el proceso para un segundo juicio político al presidente saliente, Donald Trump.

Uno de los primeros detenidos fue Richard Barnett, el hombre que en el asalto al Congreso de EE.UU. del miércoles entró y se hizo fotografías en la oficina de la presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, y quien fue aprehendido en Arkansas.

Barnett, ha sido acusado de entrada ilegal y violenta a un edificio restringido, así como conducta desordenada en el Capitolio y robar propiedad pública, por el correo de la legisladora que presuntamente se llevó después de haber posado para los fotógrafos.

Asimismo, fueron arrestados Adam Christian Johnson, a quien se vio en las imágenes cargando con el atril de Pelosi en pleno asalto al Congreso; y Jake Angeli,un miembro del movimiento de teorías de la conspiración Qanon que se hace llamar “Yellowstone Wolf” en su canal de YouTube, en Florida y Arizona, respectivamente.

INSURRECCIÓN

Pelosi aseguró este viernes en una carta a sus colegas que iniciaría el proceso de juicio político (“impeachment”) si Trump no dimitía de forma “inmediata”, algo que parece muy improbable.

Los demócratas prevén acusar al actual mandatario de “incitar una insurrección” por su responsabilidad en el asalto al Capitolio.

El lunes es cuando planean presentar su cargo contra Trump y votar en el pleno para acusarle formalmente de ello a mediados de la próxima semana, pero bajo el sistema estadounidense, es el Senado quien debe encargarse de desarrollar el juicio político, algo poco probable.

Foto cedida este 9 de enero por el Departamento del Sheriff de Arkansas del condado de Washington que muestra a Richard Barnett de Arkansas, quien fue arrestado por cargos federales derivados del motín del 6 de enero en el Capitolio de los Estados Unidos en Fayetteville, Arkansas, Estados Unidos. EFE/EPA/WASHINGTON COUNTY SHERIFF

A la propuesta se sumó Lisa Murkowski, de Alaska, la primera senadora republicana en pedir la dimisión del presidente saliente al que se acusa de haber instigado el asalto al Capitolio del pasado miércoles, que dejó cinco muertos.

“Quiero que renuncie. Lo quiero fuera. Ha causado bastante daño”, dijo Murkowski en una entrevista con el diario Anchorage Daily News en relación al asalto violento de los seguidores de Trump al Congreso para interrumpir una sesión en la que los legisladores iban a certificar la victoria electoral del demócrata Joe Biden.

INCAPACIDAD DE TRUMP

Pelosi también ha dejado abierta la opción de impulsar un proyecto de ley que crearía una comisión para ayudar a decidir si un presidente es “capaz” de gobernar, pero destituir a Trump por esa vía requeriría el visto bueno del vicepresidente Mike Pence, que por ahora se ha negado a actuar.

La propuesta busca crear un nuevo mecanismo para cumplir lo establecido en la Enmienda 25 de la Constitución, que indica que el vicepresidente puede reemplazar al presidente si declara por escrito que ese mandatario “es incapaz” de desempeñar el cargo.

Para ello, el vicepresidente debe contar o bien con una mayoría del gabinete o bien de “otro tipo de órgano que el Congreso pueda crear mediante ley”, algo que ahora no existe y que el proyecto de ley busca crear, aunque esa medida no tendría efecto sin la complicidad de Pence.

Antes de que Twitter suspendiera definitivamente este viernes su cuenta personal, Trump anunció que no asistirá a la investidura de Biden, quien celebró esa decisión del mandatario saliente.

“Esta es una de las pocas cosas en las que él y yo hemos estado jamás de acuerdo. Es algo bueno, que no venga”, aseguró Biden.