Washington, 15 feb. (EFE).- Cerca de tres millones de personas están sin electricidad este lunes en Texas por una tormenta invernal, que afecta a unos 40 estados de EE.UU., y que ha ocasionado el cierre de varios aeropuertos y de la mayor refinería de petróleo del país.
Según la página web poweroutage.us, que documenta los cortes de corriente, casi 2,8 millones de personas se encuentran sin electricidad en Texas; más de 325.000 en Oregón; casi 117.000 en Luisiana; y 106.631 en Misisipi.
La cadena de televisión CNN indicó que la Administración Federal de Aviación ha clausurado este lunes los aeropuertos de Baton Rouge Metro y de Lafayette, en Luisiana, debido al hielo y la nieve.
A estas instalaciones se suman los aeropuertos de Houston (Texas) y de Jackson-Medgar Wiley Evers, en Misisipi.
Por su parte, la firma Motiva Enterprises ha anunciado la clausura temporal de Port Arthur Manufacturing Complex, la mayor refinería de crudo de EE.UU., situada en Port Arthur, en Texas, debido a “las temperaturas heladas sin precedentes”.
La compañía agregó que reanudará sus operaciones tan pronto como sea seguro.
La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA, por sus siglas en inglés) indicó en un comunicado que unos 150 millones de estadounidenses -la mitad de la población del país- están actualmente afectados por los avisos de tormenta invernal.
De acuerdo a su pronóstico, se espera nieve intensa y lluvia helada en los valles del Misisipi y de Ohio, e irán avanzando hacia el noreste.
También es posible que haya bajas temperaturas y precipitaciones en el este de Texas y otras partes del centro de EE.UU., así como en el sureste, mientras que en el oeste la predicción adelanta que habrá fuertes lluvias en Oregón y California.
La tormenta ha ocasionado escenas inéditas en Texas, donde ha nevado en puntos tan al sur como Brownsville, en la frontera con México y donde solo se ha registrado nieve en dos ocasiones en la historia desde que los registros comenzaron en 1898.
El fenómeno también ha ocasionado un descenso de las temperaturas que no se había visto en décadas en algunas partes del país, como Dallas, que ha registrado 5 grados Fahrenheit (-15 grados Celsius) y Oklahoma City -6 grados Fahrenheit (-21 grados Celsius). Ambas ciudades no habían vivido un frío similar desde 1989.
Rapid City, en Dakota del Sur, ha experimentado cinco noches consecutivas por debajo de los -12 grados Fahrenheit (-24 grados Celsius), lo que no ocurría desde 1943.