Ciudad de México, 6 abr (EFE).- Los tratamientos con inmunoterapia se han convertido en una esperanza de vida para los pacientes que padecen cáncer de pulmón, pues pueden prolongar su vida hasta cinco años tras su diagnóstico.
“Antes, esta esperanza se reducía a meses, con tratamientos combinados con quimio e inmunoterapia, los pacientes puede encontrarse en muy buenas condiciones con el paso de los años”, expuso el oncólogo Jorge Alatorre Alexander.
Durante la conmemoración del Día Nacional del Cáncer de Pulmón, el especialista en tumores del tórax, recordó que este padecimiento es el segundo más frecuente en la población a nivel mundial.
Además, es la neoplasia con mayor mortalidad, pues de 2,2 millones de casos que se diagnostican cada año, 1,8 millones mueren.
“La mortalidad, si la comparáramos, es similar a la que se ha tenido en un año de pandemia por la covid-19”, refirió.
Lamentó que 99% de estos casos se detectan en etapas tardías, lo que impacta en las posibilidades de sobrevivencia.
“Si se detecta oportunamente, 60% de los pacientes podrían estar vivos a cinco años de su diagnóstico”, manifestó.
TERAPIAS INNOVADORAS
Alatorre detalló que los avances científicos han permitido que una cuarta parte de las personas con cáncer avanzados puedan ser candidatas a tratamientos específicos a blancos moleculares, es decir, inmunoterapia.
Este tipo de tratamientos se basan en anticuerpos monoclonales que ayudan a que las células sanas eliminen a las cancerígenas con lo que se logra erradicar los efectos de la enfermedad.
No obstante, aseveró que estas terapias no se utilizan en todas las instituciones de salud debido a la falta de disponibilidad y a los costos.
“El acceso es diferente, sin embargo, hay instituciones públicas que sí las utilizan, por lo que es necesario empujar para que el mejor tratamiento esté disponible”, dijo.
PREVENIR ES CLAVE
Anna María Rojowska, directora asociada médica de la farmacéutica MSD, señaló que es indispensable que las personas limiten el riesgo de desarrollar cáncer, no solo el de pulmón.
Para ello, refirió, es necesario que las personas mantengan un peso adecuado y estable, realicen actividad física, lleven una dieta adecuada y balanceada y evitar fumar y el humo de segunda mano.
Aunado a ello, se debe estar atento a los signos de alerta en cáncer de pulmón, como tos que no desaparece o empeora, dolor en el pecho, dificultad para respirar, sibilancias, tos con sangre, cansancio y pérdida de peso sin causa conocida.
Del mismo modo, el doctor Alatorre recomendó a quienes cuenten con antecedentes familiares de este cáncer realizarse tamizajes anuales para detectar a tiempo cualquier situación anormal.
Patricia Mondragón, presidenta de Respirando con Valor, señaló también que es importante quitar el estigma de esta enfermedad, ya que aunque el 85 % de los casos están asociados al tabaquismo, existen también otras causas.
“Es una tarea lenta que se conseguirá con información y educación”, concluyó.