Washington, 11 abr (EFE News).- Estados Unidos está dispuesto a trabajar con el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, según afirmó Juan González, el principal asesor del presidente Joe Biden para Latinoamérica, después de las acusaciones que vinculan al mandatario con el narcotráfico.
“Él en este momento es el presidente elegido de Honduras, vamos a trabajar con su Gobierno, vamos a buscar áreas de interés común”, afirmó González en una entrevista transmitida este domingo por la cadena CNN en español, ante la pregunta de si el jefe de Estado hondureño es un “un interlocutor válido” para Washington.
El asesor presidencial puntualizó que el Departamento de Justicia de EE.UU. “funciona de forma independiente” y aclaró que desde el Ejecutivo no pueden “dirigir qué pueden y qué no pueden hacer”.
“Nosotros tenemos que trabajar con los Gobiernos, pero no solo con los Gobiernos, obviamente el canciller hondureño (Lisandro Rosales) va a estar aquí esta semana, Ricardo (Zúñiga, el enviado especial de Washington para el Triángulo Norte de Centroamérica) y yo nos vamos a reunir con él, buscar áreas de trabajo conjunto”, explicó.
La declaración de González contradice una afirmación del portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, quien el pasado 9 de marzo advirtió de que Washington no puede tener lazos estrechos con líderes que no luchan contra la corrupción, en respuesta a una pregunta sobre las implicaciones de las acusaciones contra Hernández.
El funcionario se refirió igualmente a El Salvador y reconoció que su presidente, Nayib Bukele, ha logrado bajar el índice de inseguridad en el país, lo que, consideró, “ha tenido un impacto sobre la inmigración”.
No obstante, rebatió el argumento del gobernante “de que uno a todo coste puede bajar la inseguridad”.
“Francamente no estamos de acuerdo. Nosotros pensamos que cualquier política de Gobierno tiene que respetar las instituciones, tiene que respetar la libertad de los medios para que lo critiquen a uno”, apuntó el funcionario, al aludir, entre otros, a la decisión de Bukele de irrumpir en el Parlamento acompañado por integrantes del Ejército y la Policía para presionar por la aprobación de un préstamo para su lucha contra las pandillas.