San Cristóbal de las Casas (México), 3 jun (EFE).- Los pueblos indígenas en el estado de Chiapas afrontan las elecciones de este domingo en México de forma desigual, sin apenas participación política, a pesar de la influencia que ha tenido en la zona el movimiento zapatista.
“Para las comunidades no ha cambiado nada. Siguen los mismos esquemas de anteriores gobiernos y con el presidente Andrés Manuel (López Obrador) no habido nada sustancial”, explica a Efe Marcos Girón Hernández, investigador por la Universidad Autónoma Metropolitana en Xochimilco.
Girón Hernández, de origen Tzeltal, considera que a pesar del movimiento zapatista (surgido el 1 de enero de 1994) no hay cambios notorios en la situación de la participación política de los pueblos indígenas.
Los indígenas mantienen sus propias formas de representación, como ocurre en el municipio de Oxchuc, que desde 2019 celebra sus elecciones municipales con las reglas del Sistema Normativo Propio de Usos y Costumbres que sustituye al sistema de partidos políticos.
Girón Hernández recuerda que con frecuencia se produce una manipulación en el registro de candidaturas para cualquier tipo de cargo, lo que justifica el rechazo de las comunidades al sistema convencional de partidos.
“Vemos a muchos políticos que dicen pertenecer a un pueblo originario y eso no es cierto, eso viola las leyes electorales”, agrega Girón Hernández.
“Participan -continúa- con una propuesta electoral que regirá los destinos de los pueblos originarios. Es una cosa aberrante que en Chiapas se sigan rigiendo por esos patrones”.
La participación política de las mujeres indígenas sigue también un patrón de simulación como ocurre en San Juan Chamula, donde participan 4 mujeres y 6 hombres a la presidencia municipal y solo a una se le ha visto hacer campaña.
TEMAS DE CAMPAÑA
Los temas de campaña se centran en la política de desarrollo, infraestructura social, educación, salud, la inclusión e igualdad de la mujer y transparencia al ejecutar los proyectos sociales, además de los problemas agrarios.
Girón Hernández considera que no hay propuestas para enfrentar un modelo educativo diferente, “más solidario, (con) más cooperación, más humano, esas propuestas no existen”.
“O un modelo de desarrollo -prosigue- que fortalezca los recursos naturales, que fortalezca las cuencas, los cambios y usos de suelo”.
CASTIGO AL OFICIALISMO
Según las encuestas, las comunidades tzotziles, choles, tzeltales y tojolabales afirman que habrá un voto de castigo para Morena, el partido en el poder desde 2018.
Mario Gómez Entzin, cronista del pueblo Tzeltal de Chanal, explica a Efe que habrá cambio de color pues el PRI siempre ha ganado en su municipio de Chanal.
Por su parte, Gladis Domínguez de la comunidad Chol y residente en Palenque lamenta que el proceso electoral esté viciado.
“Morena nos decepcionó, no respetó lo que prometía” señala.
Las encuestas indican también que no habrá abstencionismo por el efecto de la pandemia, más bien la posible baja participación se deberá al hartazgo de las comunidades indígenas por la política, un cansancio que se observa en el cierre de caminos y accesos a algunas aldeas para evitar que entren los políticos.
