Washington, 25 oct (EFE).- Mientras miles de migrantes continúan en México su caravana hacia al norte, el Gobierno de Estados Unidos dice estar “listo” para lidiar con el incremento en el número de migrantes, dijo hoy este lunes un portavoz de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Durante el fin de semana pasado una nueva caravana conformada por unos 6.000 migrantes, en su mayoría de países centroamericanos y de Haití, se abrió paso entre centenares de agentes de la Guardia Nacional de México, en la ciudad sureña de Tapachulas, resueltos a seguir su marcha hacia Estados Unidos.
Cuestionado por Efe sobre esta caravana, el portavoz de la agencia indicó que CBP “planifica para todos los escenarios posibles sobre la base de la información acerca de las operaciones de los contrabandistas o los movimientos de los migrantes”.
“Nuestra posición y respuesta se sustentan en un análisis integral y no en un solo informe”, agregó sobre las noticias que han llegado a Estados Unidos sobre la salida de esta caravana.
“CBP está listo para lidiar con cualquier incremento potencial en el número de detenciones de migrantes y trabajamos para asegurar la protección de nuestras fronteras gestionando, al mismo tiempo, un sistema de inmigración justo y ordenado”, dijo el portavoz.
La semana pasada la cadena de televisión NBC informó que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), al que pertenece CBP, pondrá a fin de mes en operación una red de vigilancia en Centroamérica y Sudamérica de las caravanas de migrantes que se dirigen hacia la frontera estadounidense.
En el año fiscal 2021, que concluyó el pasado 30 de septiembre, CBP efectuó 1.734.686 detenciones a migrantes, la cifra más alta desde 1986, aunque muchos de ellos fueron detenidos varias veces en sus diversos intentos de ingresar al país tras ser expulsados de EE.UU.
El representante demócrata de Texas, Henry Cuéllar, dijo la semana pasada que CBP ha pedido que el Departamento de Defensa supervise la ubicación de globos aerostáticos a lo largo de toda la frontera suroeste, comenzando con cada sector en Texas.
Cuéllar, que preside el Comité de Asignaciones para Seguridad en la Cámara de Representantes, dijo que CBP pidió la supervisión militar de los globos, y asimismo apoyo aéreo y terrestre adicional en la frontera.
En septiembre al Gobierno del presidente Joe Biden le tomó de sorpresa la llegada de más de 17.000 migrantes, en su mayoría haitianos, que se congregaron bajo un puente internacional en Del Río, en Texas, tras cruzar la frontera con México.
Según NBC, la nueva unidad de vigilancia proveerá a DHS con “indicios y advertencias” de posibles oleadas de migrantes recolectando datos de personal de la agencia en América Central y América del Sur.
La cadena añadió que un documento de planificación de DHS indica el propósito de “establecer vigilancia aérea de los camiones y campamentos de migrantes que se congregan en las fronteras, y un incremento de la comunicación con las agencias de inteligencia y de policía en otros países”.
La información permitirá que DHS asigne recursos y personal a las áreas de la frontera donde se esperan las caravanas y, según funcionarios que NBC cita pero no identifica, ayudará a contrarrestar los mensajes en redes sociales que aseguran, falsamente, que EE.UU. permitirá a ingresar y quedarse a los inmigrantes.