Miami, 15 feb (EFE).- Los bomberos del condado de Miami-Dade continúan combatiendo este miércoles el fuego que se declaró el pasado domingo en una planta de tratamiento de desechos local, que no ha dejado heridos pero aún no ha sido sofocado del todo a causa de un edificio parcialmente colapsado.
Daniel Cardeso, el jefe adjunto de los bomberos de este condado del sur de Florida (EEUU), señaló que la completa extinción del incendio no será posible hasta que se pueda “mitigar los peligros del edificio parcialmente derrumbado”.
Agregó que una vez logren ello, podrán ingresar al lugar con maquinaria pesada para remover los escombros y las pilas de restos de la estructura y así tener una mejor idea del fuego remanente, el cual afecta todavía a dos de los edificios que comprende el complejo.
“Todo lo que podemos hacer desde un punto de vista seguro es mantener el fuego bajo control”, señaló Cardeso en una declaración, y añadió que hasta que no sean removidos los escombros de ese edificio no podrán retirar una montaña de basura de 30 pies (9 metros) que hay en la edificación.
La noche del lunes llegaron a Miami-Dade personal de la gubernamental Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) para estudiar la calidad del aire en la zona, una preocupación para los vecinos de la zona aun cuando las autoridades locales han señalado que los informes tras el incendio revelan que no hay contaminación.
“El condado de Miami-Dade realizó pruebas de calidad del aire en las primeras 24 horas y de forma continua para garantizar la seguridad de los residentes del área, y hasta ahora todas las pruebas han regresado a niveles normales”, aseguró la noche del martes la oficina del condado.
Roberto González, vecino del área, declaró al canal local NBC6 que ha tenido problemas para respirar, además de empezar a padecer de dolores de cabeza y garganta, y que debido a ello se ha visto obligado a usar una mascarilla, además en un momento dado trasladar a su familia a un hotel.
A los vecinos se les ha recomendado mantenerse dentro de sus casas con las ventanas cerradas, mientras que las escuelas públicas locales han suspendido de forma temporal algunas actividades al aire libre.
Los bomberos estiman que el incendio pudo originarse en una cinta transportadora, pero se encuentran todavía en las fases preliminares de investigación.
En total ha ardido un volumen de desechos equivalente a dos campos de fútbol, según los bomberos.
Cada año se procesan allí más de 685.000 toneladas de desechos que, de lo contrario, hubieran terminado en los rellenos sanitarios, según la web de la planta.