Miami, 6 mar (EFE).- Un grupo bipartidista de senadores de Estados Unidos encabezado por el demócrata Dick Durbin enviaron una carta a Tania Reneaum Panszi, secretaria ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para “acelerar los avances de la investigación sobre el asesinato” de los opositores cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero.
El grupo bipartidista firmante está integrado por los senadores Marco Rubio (republicano por Florida), Tim Kaine (demócrata, Virginia), y Bill Cassidy (republicano por Luisiana).
También firman la misiva Bob Menéndez (demócrata por Nueva Jersey), Ted Cruz (republicano por Texas), Ben Cardin (demócrata por Maryland) y Mark Warner (demócrata por Virginia).
“Le escribimos para solicitar una actualización de la investigación sobre la muerte sospechosa y trágica del reformador político cubano Oswaldo Payá Sardiñas en 2012. En los más de 10 años transcurridos desde que su automóvil se salió fatalmente de una carretera cubana, se ha hecho poco o nada para sancionar a los responsables”, comienza la carta fechada este lunes 6 de marzo.
La familia de Payá denunció desde el primer momento que fue un atentado en el que intervino otro vehículo y en 2013, junto a la de Cepero, planteó la denuncia ante la CIDH, que ha tardado nueve años en convocar la primera audiencia pública, pero tiene desde hace tiempo toda la información del caso.
“Seguimos creyendo”, añade la carta, “que, incluso sin la cooperación del gobierno cubano, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos es la más adecuada para llevar a cabo esta necesaria investigación y rendición de cuentas. Estamos preocupados por los persistentes retrasos en este esfuerzo”.
El 13 de diciembre de 2021, en una entrevista con Efe en vísperas de la primera audiencia del “caso 9.416” ante la CIDH, Rosa María Payá, hija del opositor cubano Oswaldo Payá, destacó que un reconocimiento -y condena- por parte del organismo de la responsabilidad del Estado cubano en el aparente accidente en el que perdieron la vida su padre y Harold Cepero en 2012 sería “muy importante” para las familias.
“El trabajo de Payá, las amenazas sostenidas en su contra y las circunstancias clave del día en que murió están bien documentados”, afirman los senadores en su carta.
“La Comisión ha demostrado a partir de investigaciones anteriores, como la Comisión de Alto Nivel sobre Nicaragua de 2019, que puede realizar su trabajo crítico incluso si el estado en cuestión no coopera”, reza la carta.
Añade además que “investigaciones como la de la muerte de Payá sacan a la luz no solo problemas de derechos humanos del pasado, sino que también ayudan a disuadir de nuevos actos de represión”, escribieron los senadores en la comunicación oficial de la oficina del senador Durbin, demócrata por el estado de Ilinois.
Según los políticos estadounidenses, “la familia Payá y los abogados del Centro R.F. Kennedy presentaron la demanda ante la CIDH hace más de 9 años ya y han estado actualizando a la Comisión con toda la evidencia descubierta durante este tiempo”.
Según comunicado de la oficina del senador Durbin, “en 2002 Payá inició el Proyecto Varela que buscaba una mayor libertad política en Cuba a través de una campaña de petición pacífica y un proceso de referéndum como lo permite la constitución cubana”.
“El gobierno cubano no solo rechazó el esfuerzo histórico y cambió descaradamente la disposición constitucional que permitía tal vía pública para el cambio, sino que también comenzó una década de vergonzoso acoso a Payá y su movimiento”, subraya el comunicado.
“Los miembros de la Organización de los Estados Americanos y la comunidad internacional esperan de la Comisión protección, rendición de cuentas y justicia. Por lo tanto, bríndenos una actualización sin demora sobre los esfuerzos en curso y futuros en el caso Payá”, solicitaron a Reneaum Panszi los senadores.
