Redacción deportes, 26 abr (EFE).– Los Grizzlies ganaron en la noche del miércoles a los Lakers por 116-99 y forzaron el sexto partido de su serie de los playoffs gracias a la actuación de Desmond Bane y Ja Morant, que aportaron 64 puntos para su equipo.
Los Lakers fueron incapaces de rematar a los Grizzlies. Tendrán una nueva oportunidad el viernes en Los Ángeles, ante su público. Pero de momento, los Grizzlies han dejado la serie en un 3-2 a favor del equipo angelino gracias a la actuación de Bane y Morant, que tuvieron estadísticas similares.
Ambos con un doble-doble. Bane de 33 puntos y 10 rebotes, más cinco asistencias. Morant de 31 puntos y 10 rebotes a los que sumó siete asistencias. Jaren Jackson Jr. también consiguió un doble-doble de 18 puntos y 10 rebotes.
Y el español Santi Aldama, en los casi 14 minutos que jugó, tuvo una actuación destacada, con siete puntos, cinco rebotes y tres asistencias además de un robo.
Por su parte, el controvertido Dillon Brooks sólo hizo ocho puntos tras 15 lanzamientos a canasta. Y lo que fue peor, los Lakers hicieron evidente su falta de respeto por el jugador de Memphis al que en muchas ocasiones le dejaron tirar con total libertad para ver como fallaba de forma repetida.
Los Lakers tuvieron en el veterano Anthony Davis su mejor jugador. Incansable durante todo el partido, el pívot concluyó la noche con un doble-doble de 31 puntos y 19 rebotes tras jugar 35 minutos.
Su compañero LeBron James consiguió también un doble-doble de 15 puntos y 10 rebotes. Pero James sólo tuvo un 29% de acierto de tiros de campo y un 11% en triples, de los que intentó nueve y sólo anotó uno.
D’Angelo Russell anotó 11 puntos y 10 asistencias mientras que Austin Reaves sumó 17 puntos, ocho rebotes y seis asistencias.
Sin opciones, los Grizzlies saltaron a la pista dispuestos a apabullar a los Lakers, utilizando a Bane de ariete. El escolta de Memphis estaba inspirado: anotó los dos triples que intentó en el primer cuarto y sólo falló uno de los cuatro tiros de dos que intentó.
Mientras, Morant agujereaba la defensa de los Lakers con entradas al aro con las que consiguió sus cuatro canastas del primer cuarto.
Cuando terminaron los 12 primeros minutos, Bane tenía ya 14 puntos y Morant 8.
Por los Lakers, Davis era quien alzaba la enseña de Los Ángeles ante la falta de acierto de LeBron James en ataque.
“King” James no acertó ninguno de los tres triples que intentó y sólo anotó una canasta de dos en ese periodo.
Mientras, Davis se multiplicaba. En defensa capturó cinco rebotes y en ataque anotó 9 puntos, incluido un triple. El que más se le acercó en el primer cuarto fue Rui Hachimura, que desde el banquillo anotó los tres tiros que intentó.
Esa fue la tónica de los Lakers durante el partido. LeBron con más fuerza que acierto mientras que Davis se partía la espalda, literalmente, en los dos aros.
Cuando terminó el primer cuarto, los Grizzlies estaban ya 14 puntos arriba 38-24. A los Lakers les faltaba velocidad y los de Memphis les negaban segundas oportunidades.
En el segundo cuarto, Reaves despertó. Tras no anotar ningún punto en los primeros 12 minutos, el escolta empezó a conectar canastas. Con dos triples y una canasta y dos tiros libres, terminó el segundo cuarto con 10 puntos. Davis hizo otros nueve puntos a la vez que Morant y Bane aflojaban el ritmo.
Al llegar al descanso, los Lakers habían recortado la diferencia a nueve puntos, 61-52, y preparaban el terreno para darle la vuelta al marcador en la segunda mitad.
En los primeros minutos del tercer cuarto, casi lo consiguen. A tres ataques fallidos consecutivos de los Grizzlies, D’Angelo Russell respondió con dos triples y un tiro de dos. Los Lakers hicieron un parcial de 0-8 y se colocaron a 61-60.
En dos ocasiones los Lakers se colocaron a un punto de los Grizzlies gracias al despertar temporal de James y Russell.
James, que sólo había conseguido una canasta en la primera mitad y fallado dos de los cuatro tiros libres, reaccionó tan pronto como olió la sangre en el agua. En el tercer cuarto consiguió un 100% de acierto: un triple, dos tiros de dos y dos tiros libres.
Russell por su parte, anotó dos triples de cuatro intentos y, como LeBron, consiguió nueve puntos en el periodo. Pero todo fue un espejismo.
Tras estar 75-74, los Grizzlies hicieron un parcial de 19-2 que rompió el espíritu de los Lakers. El tercer cuarto terminó con el marcador en 94-76.
La respuesta de los Lakers en los últimos 12 minutos fue desesperada. Los primeros nueve tiros de lo visitantes fueron triples, de los que sólo anotaron dos.
La ventaja de los Grizzlies se disparó a 24 puntos, 106-84, y aunque los Lakers consiguieron rebajarla a 12, 106-94, el partido estaba definitivamente perdido para los angelinos.