Washington, 9 may (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo este lunes que espera que los miles guionistas de Hollywood en huelga indefinida desde el 2 de mayo reciban un “acuerdo justo” por parte de las empresas de medios de comunicación.
El presidente demócrata aseguró en Washington que “espera sinceramente” que la huelga de los miles trabajadores que forman parte del Sindicato de Guionistas de EE.UU. (WGA) “se resuelva”.
Biden pidió a su vez que se le ofrezca a los guionistas “el acuerdo justo que merecen lo más pronto posible”, durante una intervención en un evento para celebrar el mes de la herencia asiática y de los nativos hawaianos y de las islas del Pacífico.
Desde el pasado lunes, el WGA anunció el inicio de una huelga indefinida después de no llegar a un acuerdo con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP) para la realización de un nuevo contrato más justo.
Desde entonces, decenas de miembros de la WGA ya han empezado a recibir notificaciones por parte de los estudios acerca de cómo afectará esta interrupción de su actividad laboral.
Compañías como Amazon, Disney, Netflix, Paramount, Sony, Warner Bros. Discovery, Apple y NBC Universal que les han hecho saber que sus “servicios” y “compromisos” están “suspendidos” hasta que se desconvoque la huelga y que esto podría afectar gravemente a sus relaciones contractuales.
La semana pasada, WGA publicó en su página web las peticiones del gremio para la AMPTP, entre las que destacó la exigencia de un pago justo de los “residuals”, las remuneraciones que recibe el equipo de trabajo por la retransmisión de sus proyectos.
Para lograrlo, los guionistas exigieron más transparencia a las plataformas de “streaming” sobre las veces que su trabajo era reproducido por algún usuario.
Otro de los puntos importantes que la AMPTP se negó a discutir es la regulación de la inteligencia artificial (IA) en la realización de guiones.
Así, el carácter indefinido de la huelga deja una gran incógnita sobre cuánto podrían alargarse.
El último paro de escritores se produjo en noviembre de 2007 y se prolongó durante casi cien días, lo que desembocó en aproximadamente 2.100 millones de dólares de pérdidas para el sector audiovisual de EE.UU. y en el despido de 37.000 profesionales.