Chicago (EE.UU.), 7 mar (EFE).- Steph Curry acabó tocado por una peligrosa torsión de tobillo el partido perdido por los Golden State Warriors en casa contra los Chicago Bulls (125-122).
Curry se torció un tobillo tras una entrada con menos de cuatro minutos en el cronómetro del cuarto período y regresó cojeando visiblemente dolorido a los vestuarios.
Los Bulls, con un estelar DeMar DeRozan (33 puntos y ocho rebotes), y 33 puntos y once rebotes de Nikola Vucevic, ganaron en el campo de los Warriors por primera vez en nueve años. Su última victoria en la Bahía se remontaba al 27 de enero de 2015.
Los de Chicago encadenaron cuatro victorias seguidas fuera de casa por primera vez este curso y sumaron su vigésima segunda victoria del curso en el denominado ‘clutch’ (finales apretados), la mejor marca de la NBA.
Los Warriors cayeron pese al triple doble número 32 de Draymond Green (11 puntos, 10 rebotes y 12 asistencias). Klay Thompson aportó 25 puntos saliendo del banquillo.