Chicago (EE.UU.), 22 ago (EFE).- La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se comprometerá este jueves a unir el país si llega a la Casa Blanca y a ser una presidenta “para todos los estadounidenses”, según extractos adelantados del discurso que pronunciará para aceptar la nominación demócrata.
“Sé que hay personas de diversas opiniones políticas conectadas esta noche. Y quiero que sepan: prometo ser una presidenta para todos los estadounidenses”, declarará Harris.
“Seré una mandataria que nos una en torno a nuestras aspiraciones más altas. Una líder que escucha, que es realista, práctica y con sentido común. Y que siempre lucha por el pueblo estadounidense. Desde los tribunales hasta la Casa Blanca, ese ha sido el trabajo de mi vida”, afirmará.
Según los fragmentos anticipados, también instará a los votantes a aprovechar la oportunidad de dejar atrás la era del expresidente y candidato republicano Donald Trump para vivir un nuevo comienzo.
“Con estas elecciones, nuestra nación tiene una preciosa y fugaz oportunidad de superar la amargura, el cinismo y las divisiones del pasado. Una posibilidad de trazar un nuevo camino. No como miembros de un partido o facción, sino como estadounidenses”, proclamará ante miles de personas congregadas en un estadio de Chicago.
Durante su intervención, Harris buscará definirse ante el electorado narrando su historia personal, contrastará su visión optimista con la “oscuridad” de Trump y basará su ideario en un fuerte sentido patriótico, según detalló a la prensa una fuente próxima a la preparación del discurso.
Al aceptar la nominación, la vicepresidenta marcará un hito en la política estadounidense al convertirse en la primera mujer de ascendencia afroamericana y sudasiática que recibe la candidatura presidencial de uno de los dos grandes partidos del país.
Cuando levante la vista, Harris podrá ver un mar de mujeres vestidas completamente de blanco, el color que unía al movimiento sufragista de principios del siglo XX, en defensa del derecho femenino al voto y a la participación política.
Queda por ver si la vicepresidenta se vestirá también de blanco, como han hecho otras mujeres que han alcanzado altos cargos políticos a lo largo de la historia, en honor a la lucha que lo hizo posible.
Solo una mujer antes que Harris ha recibido la nominación presidencial demócrata: Hillary Clinton, quien en 2016 vistió un traje blanco al aceptar la candidatura en la convención del partido celebrada en Filadelfia.