Ciudad de México, 18 sep (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este miércoles que no se equivocó en alguna decisión durante su Gobierno, que concluye el 30 de septiembre, por lo que se va con la “conciencia tranquila”.
“No (hubo algún momento de equivocación). Nos fue muy bien por virtud y por suerte. Además, eso de los errores que uno comete, para eso le pagan a muchos, para encontrar los errores que yo cometo. No les voy a hacer el trabajo, que se apliquen, para eso son los críticos”, respondió a pregunta expresa en su conferencia matutina.
El mandatario reconoció antes que tiene pendiente resolver el caso de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa en 2014 en Guerrero, estado del sur de México, pero ha defendido que le dejará “las bases de la transformación” a Claudia Sheinbaum, la presidenta electa.
“Me da mucho gusto irme tranquilo porque es mi vida, es mi pueblo, es mi país, entonces dejarlo en buenas manos es una bendición, entonces yo estoy muy contento”, manifestó ahora.
El gobernante mexicano reivindicó como principal logro la reducción de la pobreza, al citar en su último Informe de Gobierno oficial que 9,5 millones de mexicanos salieron de esta condición de 2018 a 2023, según el Banco Mundial.
También destacó que el peso mexicano acumula una apreciación del 8,8% desde que asumió el cargo en diciembre de 2018.
“Claro que nosotros no somos perfectos, ya lo he dicho muchas veces, la perfección tiene que ver con el creador, con la naturaleza. Las mujeres, los hombres, cometemos errores, todos. Pero en el balance yo tengo que dar gracias al creador, gracias a la naturaleza, gracias a la vida”, manifestó.
Sheinbaum recibirá la banda presidencial el 1 de octubre con la promesa de construir “el segundo piso” de la “transformación” que comenzó López Obrador.
“Gracias al pueblo de México porque me voy a ir con mi conciencia tranquila y muy contento. Me dediqué a servir al pueblo y lo hice con mucho amor y se puede gobernar bien”, comentó el mandatario saliente.