Nueva York, 25 sep (EFE). La película ‘Pesadilla antes de Navidad’ traspasó este miércoles la pantalla y se transformó en un sendero de luces y sonidos que hasta el 30 de noviembre alumbrará el Jardín Botánico del Bronx, en Nueva York.
El amplio jardín sirve de punto de encuentro para los personajes y paisajes de este filme de Tim Burton, que cobran vida en 20 instalaciones para recibir a los curiosos que visitan la ciudad de Halloween, dirigida por el icónico Jack Skellington.
Decenas de personas acudieron hoy al pase de prensa de este sendero -que se abrirá al público mañana 26 de septiembre por 50 dólares la entrada-, y algunos incluso se animaron a disfrazarse de los protagonistas de la película y recorrer el camino vistiendo el traje de chaqueta de Jack y su máscara de esqueleto.
Este espectáculo inmersivo nace de la mente del español Iñaki Fernández, fundador de la productora LETSGO, el brasileño Felype de Lima, director creativo del show, Jeffrey Seller, productor del musical Hamilton, y Maggie Brohn, directora de operaciones de Adventurelive
Fernández ya ha trabajado con los mundos de Tim Burton en un exitoso laberinto que se instaló hace años en Madrid; su admiración por el director, cuenta, viene de los “mundos” que crea en sus películas y que son capaces de traspasar generaciones.
“(Tim Burton) es una bella persona, tenemos mucha amistad con él y la verdad es que da mucho gusto trabajar con él. Es una persona muy cercana y muy meticulosa. Cuando ha estado con nosotros ha sacado los pinceles y se ha puesto a dibujar para mejorar nuestro trabajo”, señala a EFE Fernández.
Aunque Burton no ha estado involucrado en la creación de este sendero, la implicación de su equipo creativo se nota en los detalles y el cuidado con los que están hechos tanto las estatuas de los personajes como los paisajes que sirven de telón de fondo para la historia de Jack Skellington.
Para Felype de Lima, los protagonistas de la película son como “sus hijos”: “Soy un fan del cine de Tim Burton, desde pequeño siempre he visto Eduardo Manostijeras, la Novia Cadáver… Me gusta su estética, su forma de contar la muerte, sus monstruos y sus fantasmas”.
Un “terrorífico” paseo por la ciudad de Halloween
Para pasar a la ciudad de Halloween, el público debe cruzar una enorme calabaza de luces y una serie de aros de colores mientras suenan a todo volumen las famosas canciones de la película.
Los frondosos árboles del jardín botánico, alumbrados con luces de colores, sirven de fondo para este recorrido, en el que se pasea alrededor de antorchas de fuego y calabazas gigantes iluminadas.
El momento más “terrorífico” del recorrido llega cuando el espectador atraviesa un cementerio repleto de lápidas y presidido por Jack, al que acompaña su perro fantasma Zero.
En el show destacan las esculturas de algunos de los personajes del filme, como Sally, que lleva en una silla de ruedas a Doctor Finklenstein, o Payaso, que recibe al público montado en su triciclo.
También hay espacio, cómo no, para Santa Claus -el gran enemigo de Jack al principio de la película- que está rodeado por bastones de caramelos, buzones llenos de cartas y grandes regalos.
Además, a la fauna del jardín botánico -donde uno puede ver, sobre todo, ardillas y mariposas- se suman los murciélagos y las arañas de la película, que pueden avistarse en distintos puntos del sendero.
Este recorrido, que termina con una gran escultura en la que Sally y Jack se abrazan, logra transportar a la ciudad de Nueva York directamente al 31 de octubre, donde le espera con su traje de chaqueta y su larga capa roja Jack Skellington, el rey de Halloween.
