Los Ángeles, 20 nov (EFE News).- California, uno de los estados más golpeados por la pandemia del coronavirus, mira con preocupación las cifras de nuevos contagios al romper su récord diario con más de 13.000 positivos, que le sitúan al borde del confinamiento en el condado de Los Ángeles en los próximos días y un toque de queda estatal que comienza en la noche del sábado.
El panorama no se muestra muy halagüeño para el Estado Dorado, que registró 13.005 casos este viernes, la cifra más alta desde que comenzó la pandemia. Casi 200 casos más que el pico más alto presentado en julio con 12.807 casos en un sólo día.
Con este nuevo récord, el Departamento de Salud de California reporta un total de 1.072.272 de californianos que han dado positivo al virus.
En los últimos cuatro días el promedio ha superado los 10.000 casos por día, aumentando la preocupación de las autoridades.
Las hospitalizaciones también van al alza, y este viernes 5.487 pacientes contagiados están en una institución médica, un aumento del 3,2 % diario. De esta cifra, 1.919 personas están en unidades de cuidados intensivos.
Cerca del 40 % de estos contagios se registró en Los Ángeles este jueves, con 5.031 casos, el número más alto de positivos de la covid-19 en un solo día desde que comenzó la pandemia en marzo pasado.
La crítica situación llevó al gobernador, Gavin Newsom, a emitir un toque de queda que entrará en vigor este sábado y que aplicará durante un mes desde las 10 pm a las 5 am hora local, en los condados que se encuentran en el nivel más restrictivo.
Aproximadamente el 94% de los californianos, 37 millones de personas, viven en los 41 condados que se encuentran actualmente en ese nivel.
LOS ÁNGELES AUMENTA RESTRICCIONES
El condado de Los Ángeles se adelantó en esta orden y este viernes comienza a aplicar el cierre de restaurantes y bares para prestar servicio en los locales a partir de las 10 de la noche, aunque podrán seguir vendiendo comida para llevar.
También desde este viernes solo estará permitida una ocupación del 25 % en negocios no esenciales, incluidas tiendas y oficinas, y del 50 % en restaurantes y bares con espacio al aire libre en Los Ángeles.
Pero la situación podría obligar a tomar medidas más severas en caso de que el ritmo de contagios siga por encima de los 4.500 nuevos casos diarios durante cinco días consecutivos
LA VACUNA, OTRO RETO
Simultáneamente, las autoridades de salud en California están lidiando con lo que significará la distribución de vacunas la covid-19, que se perfila como uno de los mayores esfuerzos de salud pública de la historia del estado y de condados como el de Los Ángeles.
El condado ya comenzó a adelantar esfuerzos, entre los que se incluye la adquisición de 16 congeladores de almacenamiento ultra-frío que se instalarán en toda la región, según informó el periódico Los Angeles Times.
Coincidiendo con la jornada en la que la farmacéutica Pfizer y su socia alemana BioNTech pidieron hoy autorización de emergencia al regulador del medicamento (FDA) para comenzar a distribuir su vacuna, que podría suministrarse a partir de diciembre.
