La Oferta

April 26, 2024

Indocumentados dejan sin reclamar cientos de miles de dólares en California

CARACAS (VENEZUELA), 04/12/2019.- Fotografía del 3 de diciembre de 2019 de una persona que sostiene dólares en su mano para realizar el pago por su compra en una tienda de un centro comercial, en Caracas (Venezuela). La dolarización, que de facto rige Venezuela, ha supuesto un alivio para la economía de sus ciudadanos en el 2019, aunque el país sigue sin resolver la depreciación de su moneda local y a hiperinflación se mantiene como la mas alta del mundo. EFE/ Rayner Peña

Los Ángeles, 12 may (EFE News).- El poco salario que Julio Marroquín ganó en 2020 lo ha desanimado a presentar su declaración de impuestos en California porque cree que “no le van a regresar nada”, un error que miles de indocumentados están cometiendo al dejar de cobrar cientos de dólares en las ayudas establecidas por la pandemia.

“Apenas gané 8.000 dólares en todo el año pasado”, cuenta a Efe Marroquín, que trabajaba en la cocina de un restaurante en Los Ángeles que redujo drásticamente sus operaciones por la emergencia sanitaria.

Concentrado en recuperar las horas de trabajo que perdió en el 2020, Marroquín confiesa que este año no pensaba presentar sus impuestos.

“Para qué, no me van a dar nada, y tengo que pagar al que me hace los impuestos, en estos momentos no hay dinero para eso”, explica el inmigrante de origen guatemalteco.

EL DINERO SOBRE LA MESA

Lo que Marroquín no sabía es que el hecho de haber recibido poco dinero en salarios el año pasado lo haría acreedor a varios cientos de dólares en programas de créditos fiscales en California como el del Golden State Stimulus (GSS) o el CalEITC.

El inmigrante no es el único que tiene derecho a estos recursos y no los está cobrando. Todavía hay un millón de familias trabajadoras que son elegibles para estos créditos fiscales en el Estado Dorado, pero aún no han presentado la solicitud, según datos estatales.

En este sentido, Max Moy-Borgen, gerente de Programa de Ingresos de la United Ways of California, explica a Efe que se estima que entre ese millón de familias que califican para recibir estos créditos fiscales, ha un “gran número de indocumentados”.

Con la fecha límite para presentar los impuestos tan cerca como el 17 de mayo, organizaciones como United Ways of California y gobiernos locales y el estatal han lanzado un llamado para que estas familias no dejen cientos de dólares “sobre la mesa”.

“No importa que la cifra que trabajó en el 2020 sea muy baja, a partir de un dólar ganado en un trabajo se puede presentar una declaración de impuestos”, recalca Moy-Borgen.

TODO SUMA

Entre los miles de dólares que el estado está esperando enviar está el estímulo de GSS de 600 dólares, para los que también califican los indocumentados que declaran impuestos con un número ITIN e ingresos inferiores a 75.000 dólares .

Pero si el indocumentado gana menos de 30.000 dólares el estímulo de único pago puede ser de 1.200 dólares, ahonda Moy-Borgen.

Las personas elegibles para este estímulo pierden el dinero si no presentan su declaración de renta antes del 15 de octubre del 2021.

A los fondos del GSS se suman el crédito CalEITC para personas de bajos recursos. El pago mínimo para una persona soltera podría ser de 200 dólares, pero si se tienen niños la suma puede sobrepasar los 3.000 dólares, explica Moy-Borgen.

Además existe otro crédito para padres de niños menores de 6 años que ganen menos de 25.000 dólares, y que les puede suponer un ayuda de hasta 1.000 dólares.

“Todo suma, y realmente fue una gran ayuda para podernos recuperar, y pagar todas las deudas que nos dejó la pandemia”, valora Vanessa Hernández, quién ya hizo sus impuestos con un número ITIN, y recibió el estímulo y los créditos.

UNA CARTA DE PRESENTACIÓN

Hernández, de origen mexicano, cuenta a Efe que al igual que su compañero de vida, perdió su trabajo en medio de la pandemia, y lo único que le permitió llevar a casa dinero fue limpiar dos días a la semana un edificio en Los Ángeles.

Sin poder recuperar su trabajo por completo, la inmigrante, madre de tres, dice que el dinero que la familia recibió por parte del estado “significó una gran ayuda”.

Añade que presentar los impuestos significa “una carta blanca” para que en Estados Unidos se evidencie el esfuerzo que han hecho en la emergencia sanitaria los indocumentados.