Los Ángeles, 17 ago (EFE).- Decenas de inmigrantes y activistas de Los Ángeles realizaron este jueves un llamado a la Legislatura de California para que aprueben un proyecto de ley que permitiría entregar asistencia en efectivo a los indocumentados de la tercera edad y discapacitados.
El llamado realizado en la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA) se enfocó en los miembros de la Asamblea de California que evalúan el proyecto de ley AB 1536, que otorgaría un pago promedio de 1.000 dólares mensuales a inmigrantes mayores de 65 años o discapacitados sin estatus legal.
La ley permitiría el acceso a la población indocumentada de adultos mayores y discapacitados al programa de Asistencia en Efectivo para Inmigrantes (CAPI) ya establecido en California.
“Los inmigrantes hemos envejecido trabajando para ayudar a la economía y el crecimiento de California, es más que justo que todos reciban parte del dinero que ya han pagado en sus impuestos y no se les regresa solo porque no tienen documentos”, dijo a EFE la inmigrante mexicana Helena Ayala, de 70 años, que participó hoy en la jornada.
Por su parte, el asambleísta demócrata Juan Carrillo, autor de la medida, resaltó en un comunicado que la población indocumentada que envejece está aumentando en California.
Carrillo aplaudió los esfuerzos hechos por California para permitir el acceso de indocumentados a seguros públicos de salud y asistencia alimentaria pero considera que aún falta realizar un esfuerzo para proteger a los inmigrantes sin estatus legal de la tercera edad.
Por su parte Ayala, que emigró a EE.UU. hace 40 años, enfatizó que sin una pensión muchos de los indocumentados de la tercera edad se verán forzados a ir a vivir a la calle. “Esta ley también servirá para luchar contra la crisis de indigentes”.
Los activistas hicieron también un llamado a los votantes en California para que se unan a la campaña y presionen a los legisladores para apoyar la aprobación de la ley. “Los beneficiados son abuelos, abuelas, padres, madres, que trabajaron toda su vida y necesitan este apoyo”, insistió Ayala.