Por Edgar Arias

Oakland, CA. oct. 14, 2023 – En el frío matutino de un miércoles, María Seeto, con casco y chaleco amarillo, sale de su casa en San Francisco para ir a trabajar de voluntaria como electricista.
Hace varios meses que María ha ido a ayudar en la construcción de un salón donde varias congregaciones de los testigos de Jehová de Oakland se reunirán.
“He disfrutado mucho de trabajar con voluntarios novatos y experimentados, y con gente de diversos antecedentes”, dijo María.
A nivel nacional, las mujeres representan solo el 3,9% de los trabajadores de construcción, según un informe del Instituto de Investigación sobre la Política Femenina, citado por el Departamento de Estadísticas Laborales de Estados Unidos.
Pero en las obras de construcción de los testigos de Jehová participan muchas voluntarias, expertas y novatas.
“No sé qué haríamos sin nuestras voluntarias”, dijo Robert Hendriks, representante de los testigos de Jehová en Estados Unidos. “Su trabajo es minucioso y de primera calidad. Su entusiasmo es contagioso. Son indispensables en nuestras obras de construcción.
En años recientes, cuando los Testigos reubicaron su central mundial de Brooklyn, Nueva York, al pueblo de Warwick, unos 27.000 voluntarios de todo el país vinieron a las obras, de los cuales el 25% eran mujeres, como Kierstin Golec, de Huntington, Massachusetts.
Kierstin y otras voluntarias fueron asignadas a la obra de excavación y recibieron buena capacitación para manejar equipo pesado a la par de los hombres. Kierstin recuerda cuando por primera vez se vio ante el camión volquete que iba a manejar.
“Cuando me le acerqué, ¡las llantas eran más altas que yo!”, dijo. “Era algo fantástico, impresionante, emocionante”.
De los tres años que pasó de voluntaria en esa obra, lo que nunca olvidará es la confianza que depositaron en ella y a las otras voluntarias.
“Nos capacitaron a todos, hombres y mujeres, para que participáramos al máximo posible”, dijo ella. “Confiaban en nosotras al igual que en los hombres. Nos trataron con suma dignidad. Y eso es algo que nunca olvidaré”.
María dijo lo mismo sobre la obra del Salón del Reino de Oakland. “¡Qué bueno es trabajar en un ambiente en que no hay competencia entre los trabajadores!”.
Muchos voluntarios proceden de las tres congregaciones locales que usarán el salón, pero otros vienen de Los Ángeles y de estados distantes como Washington, Oregón y Colorado. La obra deberá terminarse en diciembre.
Para más información sobre los testigos de Jehová y su historia, creencias y obras de construcción, vaya a su sitio, jw.org, que contiene información en más de 1.000 idiomas.