Nueva York, 3 nov (EFE).- Un segundo hijo del expresidente Donald Trump, Eric Trump, negó este viernes su participación en los documentos financieros de la empresa familiar sometidos a escrutinio en el juicio civil por fraude en Nueva York, como hizo en la víspera su hermano, Donald Jr.
Tanto Donald Jr. como Eric, vicepresidentes ejecutivos de a Organización Trump, están acusados junto a su padre en el caso, pero si el primero mostró cierta despreocupación en la silla de los testigos, haciendo algún comentario jocoso, el segundo pareció más tenso e irritado, según medios acreditados.
Eric Trump declaró entre ayer por la tarde y hoy que no trabajó en los documentos de condición financiera en cuestión, de hace una década, pero los fiscales mostraron correos electrónicos y certificados firmados por él a prestamistas, que contradecían su versión.
“Certifiqué algo que creía que era correcto. Mis abogados me dijeron que era correcto, y nuestra gente de finanzas me dijo que era correcto”, dijo el acusado, que también aseguró confiar en los contables de “una de las mayores firmas contables del país”, según la cadena ABC.
En un comportamiento similar al de su padre, Eric Trump se paró a hablar ante los medios presentes en el juzgado para calificar el juicio de “caza de brujas” motivada políticamente y aseguró que su familia lo ganará porque no ha hecho nada incorrecto.
Se espera que el lunes testifique el expresidente Trump, tal y como transmitió el fiscal Wevin Wallace al juez Arthur Engoron, y más adelante en la semana está previsto que lo haga su hija Ivanka Trump, que hoy mismo fue informada de que no ha prosperado una nueva apelación para evitarlo.
Hoy, además, se hizo patente la animosidad de los acusados hacia la secretaria del juez, que se sienta a su lado y a la que Trump tiene prohibido hacer referencia desde que publicó un ataque personal contra ella en las redes sociales al principio del proceso, lo que le ha costado unos 15.000 dólares de multas.
El abogado de Trump, Christopher Kise, criticó el intercambio de notas entre el juez y su secretaria, y el juez, que ya impuso una “orden mordaza” a Trump para evitar menciones al personal del tribunal, dijo que emitirá otra orden con más especificaciones sobre el asunto, según CNN.
Kise insistió en que quiere que quede registro de sus comentarios sobre el “sesgo percibido” en el juez y su secretaria, y sugirió que podría utilizarlos para una apelación, recoge el medio The Messenger.
En el juicio, que durará hasta diciembre, se dirimen varias presuntas ilegalidades en la Organización Trump, como falsedad documental, después de que el juez declarara a los acusados responsables de fraude continuado de manera sumaria, antes de empezar el proceso.