México, 31 dic (EFE).- El luchador mexicano Blue Demon Jr. lamentó este domingo que los estetas actuales de su país le perdieron el respeto a su máscara, el elemento que más caracteriza al pancracio de México.
“Los luchadores actuales no le tienen respeto a su máscara, hay una falta de valores en todos aquellos que la usan. Incluso algunos tienen diseños sin un color fijo, cambian el estilo de sus máscaras a cada rato. Cuando te dan una máscara y un nombre te deben educar para que respetes tu identidad”, explicó a EFE.
Demon Jr., hijo de la leyenda de la lucha libre mexicana Blue Demon, contó que para ganarse el derecho a ser el continuador del legado de su personaje tuvo que superar duras pruebas como cumplir el rol de ser un saco de boxeo para otros gladiadores.
“Mi papá no quería que yo fuera luchador e hizo cosas para evitarlo. En un entrenamiento me rompió la nariz y 15 días después me lesioné el hombro, a pesar de esto no dejé de entrenar. Luego me agarró de costal seis meses, me ponía a todos los luchadores que podía hasta que me cansé”.
Tras entender que su padre no quería entrenarlo, decidió irse a otro gimnasio a aprender lucha olímpica y en una de las tantas veces que tuvo que ser sufrir castigos, le hizo un ‘suplex’ a Blue Demon, quien se sorprendió por el avanzado movimiento y se dio de que su hijo tenía hambre de destacar.
Así fue como el Jr. se ganó el derecho a portar la icónica incógnita y entendió el respeto que hay que darle a una máscara en la lucha libre mexicana.
Blue Demon Jr. se dijo decepcionado de que varios luchadores suban fotos a sus redes sociales sin máscara y traten de tapar su rostro sólo con algún emoticono, además de que no entiendan que cualquier persona a su alrededor tiene un celular con el cual podrían revelar sus identidades.
“Antes no había tantas cámaras, podías pasar desapercibido en muchos lugares, ahora yo me quito la máscara y la gente, como toma fotos, puede ver cómo vengo vestido. Trato de cuidarme mucho más y moverme a distancias más largas para quitarme mi máscara”, añadió el hijo de la leyenda azul.
A pesar de que es reconocido por los críticos como un digno heredero de su padre, al principio le costó lidiar con las comparaciones y establecerse como uno de los mejores gladiadores mexicanos de peso completo.
“Para imponerme a las comparaciones dejé de escuchar por mucho tiempo y me importaron poco los comentarios, sólo me centré en mi carrera. El único día que sentí que no iba a lograr portar esta máscara fue en mi debut y después de eso no lo volví a sentirlo”, concluyó al gladiador que en 2025 cumplirá 40 años como portador de la máscara azul.