Texto y fotos por Eliana Céspedes
San Francisco, CA. 12 de noviembre – La casa de los Golden State Warriors, el Chase Center volvió a celebrar otra victoria en casa imponiéndose con 119 contra 93 de los visitantes Chicago Bulls, uno de los equipos más fuertes del Este, que a pesar de su gran récord no fue suficiente para intimidar a los imparablaes Warriors.
La estrella de la noche fue nuevamente Stephen Curry que con 40 puntos se ganó más el respeto de su equipo y sus fans.
El defensor Draymond Green ayudó con siete asistencias, entre rebotes y nueve anotaciones reforzando el triunfo para su equipo. La actuación de André Iguadola fue crucial que a pesar de no jugar mucho ayudó a su equipo con ocho puntos.
Y como todos brillan en el equipo dorado, no pudieron faltar las aportaciones de Andrew Wiggins con 15 puntos y siete rebotes y Jordan Poole con 14 en la despedida de Golden State (11-1) de su estadio tras ocho juegos como local.
El alero reserva mexicano estadounidense Juan Toscano-Anderson jugó cuatro minutos y se fue sin puntos al fallar el único tiro que hizo a canasta, pero capturó dos rebotes defensivos, dio una asistencia y recuperó un balón, en una gran labor defensiva.
Los Chicago Bulls sorprendieron con una mala actuación como visitante y con una derrota amplia. Desde que empezaron se mostraron débiles antes los dueños de casa con fallas en los rebotes, asistencias y tiros triples. Sus salvavidas fueron Zach LaVine que anotó 23 tantos y DeMar DeRozan con 18 para su equipo.
Los Golden State Warriors continúan imparables sumándose 11 triunfos en 12 partidos para los de San Francisco. Ahora les tocará ir de gira por el Este y se enfrentarán el domingo en Charlotte y el viernes que viene en Detroit.
Los Chicago Bulls estarán hasta el próximo viernes jugando como visitantes: le quedan cuatro partidos más girando por el Oeste ante rivales duros, como LA Clippers el próximo domingo.