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April 26, 2024

La covid roba derechos a las mujeres e impide celebrar en masa su gran día

EFE/EPA/CLAUDIO PERI

Redacción Internacional, 8 mar (EFE).- La llegada del coronavirus, hace más de un año, se ha traducido en un duro aumento de la violencia machista, de la sobrecarga laboral y en un retroceso de los derechos de las mujeres, una situación que hoy han denunciado los colectivos feministas en el Día de la Mujer más virtual de la historia, ya que la pandemia ha impedido grandes concentraciones.

En esta ocasión, en la que ellas tenían redoblados motivos para protestar, se ha intentado evitar que aumentaran los contagios en reuniones multitudinarias, tras las polémicas suscitadas el 8 de marzo del pasado año, apenas unos días antes de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara la crisis sanitaria.

Conferencias, exposiciones, películas, debates y conciertos en las redes para celebrar a las mujeres han sido la tónica de la jornada en la mayor parte del mundo, aunque en algunos países se han atrevido a salir a las calles.

CONCENTRACIONES VIRTUALES CON EXCEPCIONES

En los países de Europa, la mayoría de los actos convocados en el Día de la Mujer han sido virtuales con algunas pequeñas movilizaciones, como en el caso de Portugal, Italia, Francia o Ucrania, exigiéndose las medidas de seguridad de distancia y mascarillas.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, y la primera ministra neozelandesa, Jacinda Ardern, se unieron en el Parlamento Europeo para alertar de que el mundo aún no es un lugar justo para las mujeres, una desigualdad que ha agravado la crisis del coronavirus.

EFE/José Jácome

“Dicho simplemente, nuestro mundo no funciona como debería para las mujeres”, resumió Harris en una intervención grabada en vídeo ante la Eurocámara, donde alertó sobre el impacto del coronavirus en el acceso de las mujeres a la sanidad, su estabilidad económica y su integridad física.

La conmemoración en España estuvo marcada por la prohibición de concentraciones en Madrid, en un pulso entre los convocantes y la Justicia que llegó al Tribunal Constitucional, quien ratificó que prevalece el derecho a la salud sobre el de manifestación. Otras ciudades del país sí tuvieron actos, como uno en Barcelona con unos quinientos estudiantes, aunque con asistencia limitada.

Los colectivos feministas franceses y los principales sindicatos convocaron una huelga nacional con dos reivindicaciones concretas: regularizar a las mujeres sin papeles y dar más medios a las trabajadoras sanitarias, en primera línea de la crisis del coronavirus. Pese a las restricciones impuestas, se organizaron marchas en París, Burdeos, Marsella, Lyon y Rennes.

En Italia, miles de mujeres marcharon por distintas ciudades para pedir la igualdad real entre hombres y mujeres, y lo hicieron con mascarillas para evitar los contagios por coronavirus.

En Turquía, las asociaciones feministas convocaron protestas en decenas de ciudades bajo el lema “Trabajo seguro, vida sin violencia, lucha colectiva”, pese a las restricciones.

EFE/EPA/Mateusz Marek

En Pakistán, miles de mujeres se manifestaron en actos festivos en los que reclamaron sus derechos, a pesar de las ya tradicionales amenazas de los más conservadores contra las activistas por supuestamente atacar al islam.

Mientras, en América, en países como Venezuela, México, Chile y Paraguay, las mujeres salen a la calle en esta jornada para alzar su voz un año más contra la violencia, la igualdad y a reivindicar que se complete la legalización del aborto.

LA ONU EXIGE QUE LA MUJER ESTÉ EN EL CENTRO DE LA RECUPERACIÓN POSTPANDEMIA

Golpeadas especialmente por la pandemia, las mujeres deben estar en el centro de la recuperación para que el mundo avance finalmente hacia la igualdad de género, defendió este lunes Naciones Unidas.

Para la organización, aumentar la presencia de mujeres en los puestos de toma de decisiones se hace más importante que nunca en el contexto de la crisis, que ha tenido un impacto desproporcionado en la población femenina, con una destrucción de empleo mucho mayor, una mayor carga de trabajo en el hogar y un aumento de la violencia machista.